Hoy viernes en el semanario
Tiempo, Antonio Díaz, redactor en la revista, publica en la sección de Cultura un reportaje de dos páginas titulado ¿ARTE O MONIGOTES?, cuya entradilla dice lo siguiente:
"Una columna de opinión de Vicente Molina Foix, publicada en la revista Tiempo, ha abierto una interesante polémica sobre si los cómics deben considerarse como una expresión artística".
Antonio Díaz, a la sazón aficionado a los cómics, se puso amablemente en contacto con Max Vento, Álvaro Pons y conmigo para elaborar un reportaje que cubriera la polémica, y ha extractado declaraciones de los tres en su reportaje. Para complementarlo, en las dos páginas siguientes aparece una nueva
columna de Molina Foix sobre el tema junto a otra de
Ignacio Vidal-Folch donde supuestamente se da una réplica a la misma, y un faldón donde se recogen varias cartas al director (de Andrés Piera, Álvaro Meléndez, Paco Cerrejón, Raúl G. Peribáñez y Julio Pesquero) quejándose por el ya célebre artículo de Molina Foix. Enseguida comento la jugada.
Antonio Díaz, a la sazón aficionado a los cómics, se puso amablemente en contacto con Max Vento, Álvaro Pons y conmigo para elaborar un reportaje que cubriera la polémica, y ha extractado declaraciones de los tres en su reportaje. Para complementarlo, en las dos páginas siguientes aparece una nueva columna de Molina Foix sobre el tema junto a otra de Ignacio Vidal-Folch donde supuestamente se da una réplica a la misma, y un faldón donde se recogen varias cartas al director (de Andrés Piera, Álvaro Meléndez, Paco Cerrejón, Raúl G. Peribáñez y Julio Pesquero) quejándose por el ya célebre artículo de Molina Foix. Enseguida comento la jugada.
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9 comentarios:
Hasta ahora he evitado pronunciarme sobre este tema porque la verdad es que lo que opine Molina Foix sobre la validez o no del cómic me da lo mismo. Su artículo me pareció desinformado y mal argumentado, pero vamos, no es la primera vez que se publica algo así y seguro que no será la última. Y en todo caso, todo el mundo tiene derecho a decir lo que piensa. Peor me ha parecido el artículo supuestamente “reivindicativo” de Vidal Foch, ya que, siendo alguien que presume de sentir mayor interés por el cómic, ha escrito un texto a su manera todavía más desinformado que el de Molina Foix, sobre todo porque retrata una realidad que hace tiempo que no es la del cómic español (aunque quizá lo fue en la época en la que él publico su libro sobre historietas). Si lo he entendido bien, al parecer no debe existir un premio nacional de cómic porque no hay suficientes cómics españoles. Si es así, es que hace mucho, pero mucho, que no se pasa por una librería. ¡Si soy yo, que intento leerlo casi todo, y todos los meses por falta de tiempo dejo sin leer al menos dos o tres cómics de aquí que parecen interesantes! De todos modos, tampoco creo que debería dársele mayor importancia ni a uno ni a otro artículo. Ni siquiera al hecho de que exista un premio nacional de cómic (y aquí sí que creo estar en minoría). La obsesión de los lectores de cómics y también de muchos autores, por ser queridos por los estamentos oficiales y por sentirse parte del discurso cultural dominante me resulta totalmente ajena. Hasta cierto punto supongo que puede ser útil para captar más lectores, pero más allá de eso no le veo interés alguno.Nos pasa como a Charlie Brown, tras tantas ganas de ser queridos se esconde un complejo de inferioridad que desde hace mucho tiempo que no tiene razón de ser. Ah, Pepo, ¿puedes poner un link al artículo del periodista? No consigo encontrarlo.
ES que no lo han subido a la web, creo que lo harán la semana que viene. Pienso como tú sobre la columan de Vidal Foch. HAce tiempo que no sigue el tema, y no es consciente de la cantidad de tebeos españoles que se están publicando justo AHORA.
Sobre lo de los estamentos oficiales, no se trata -por mi parte- de buscar el "reconocimiento" porque sí. Es que un Premio Nacional no es sólo reconocimiento, que lo es para el público general, es también dinero para el autor que se lo lleva. Y al igual que el cine o los editores literarios reciben subvenciones, creo yo que está bien que el cómic las tenga. Vamos, digo yo. Porque, aunque está claro que tú o yo o todos los que estamos haciendo HOY tebeos en España -y no para el mercado extranjero- no lo hacemos precisamente por dinero. Pero si alguna vez tienes la posibilidad -al menos la posibilidad- de que te caiga algún dinerillo con el que pagar unas cuantas letras de la hipoteca, o que puedas ahorrar para el futuro, o te permita dedicar unos meses a escribir (a dibujar se tarda más) un tebeo sin tener que estar desesperado pensando en que podrías estar haciendo otra cosa que sí te diera dinero con el que ganarte la vida, creo que eso mal no hace a nadie, ¿no?
Y sobre Vidal Foch, me pillas además escribiendo un comentario al respecto. En otro post, ahora lo subo.
Pepo que me estado en vela esperando la respuesta de este Sr. (hahah la verdad no hahaha, bueno la verdad sufro de insomnio pero aprovecho el paso del tiempo hohoho!), sinceramente solo veo que el Sr. se retrata de pies y cabeza y a todo color.
No esperaba una disculpa a la labor que hacemos muchos de nosotros, la verdad esperaba por lo menos mas idea y fondo.
Ya por lo menos me ha quitado las ganas de saber mas de este ser mitologico tontuno del mundo viejuno.
Vuelvo a mi mundo de imagenes (no monigotes hahahah) ciao y
Un saludo!
JESUS ANTONIO
Lo bueno de esta segunda columna de vmf es que se lee rápido y se olvida aún más rápido.
Claro, el dinero de los premios está muy bien, y creo que todos los que se lo han llevado hasta ahora se lo merecían más que de sobra. Y ya que el estado tiene dinero para la cultura, lo suyo es que también participe del él el cómic.
Bueno, pues eso entre otras cosas es lo que tiene estar dentro de la cultura institucional, y lo que nos perdemos por estar al margen. No sólo es dinero en efectivo. Es dinero invertido en bienes culturales. Son libros teóricos, becas, tesis, cursos universitarios, etc. Todo eso es BUENO a mi juicio. Y no tiene por qué implicar el anquilosamiento del medio. Si ese estancamiento tiene que llegar, llegará, como ha pasado puntualmente -o transitoriamente- con otras artes. Pero no creo que sea por recibir premios o subvenciones, o entrar en los museos, eso me parece un poco tópico. Ese tipo de ciclos, o de crisis creativas, obedecen a razones más complejas.
Molina Foix se va bastante por las ramas para justificar su postura en el gusto personal -algo que no dejó patente en la suficiencia de la primera columna- y excusarse en los insultos que ha recibido en los comentarios - que a mí también me han parecido desproporcionados y quitan la razón a los defensores del cómic. Con todo, echo a faltar una disculpa hacia tantos autores de cómics a los que calificó de "dibujantes de monigotes" y a su obra de "dibujitos".
Impacientes Saludos.
Lo que tenemos es no hacer caso a este tipo, y seguir creando grandes obras, realizando más salones, más talleres, más conferencias, más premios, más homenajes, más entrevistas, más artículos, más especiales...
Todo aquello por lo que él se quejaba, para que así, algún día, se pueda decir que tenía razón.
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