jueves, 5 de agosto de 2010

WAITING FOR AZRAEL

"MS: Vincent Paronnaud [coguionista de Persépolis] y yo queríamos hacer una película con actores de carne y hueso para, en cierto modo, expresar nuestro amor al cine. Waiting for Azrael –título que llevará esta adaptación– será un canto de amor a todas las tradiciones del cine que siempre nos ha gustado, el de los años treinta, el expresionista y las películas estadounidenses de los 50, sobre todo el cine en Technicolor.

[...] FP: La película estará basada en su novela gráfica Poulet aux Prunes, que habla de su tío abuelo Naser Alí Jan, un conocido músico que murió de pena después de que se rompiera su instrumento musical, el tar (un tipo de laúd). ¿Hasta qué punto será el film fiel al libro? ¿Y cuánto de cierta tiene la historia?

MS: A mí me contaron que el tío de mi madre era un gran artista y que la gente adoraba su música. Cuando tocaba en la calle, la gente se callaba para oírle. Se sentaban a verle y a veces lloraban por cómo tocaba el tar. He visto una foto de él, y era muy guapo. Dijeron que había muerto por causas desconocidas. Y, a partir de ahí, tejí un relato. En mi película hay historias y hechos reales sacados de las vidas de distintas personas a las que he conocido que yo entretejí, pero también hay muchas otras cosas inventadas. Es decir, tiene mucho de verdad, pero también una gran parte basada en mi imaginación.

[...] En Irán se han producido cambios irreversibles, y muchos de ellos son resultado del trabajo de las mujeres. Por ejemplo, me han hablado de un pequeño pueblo llamado Abhar, en el que todas las mujeres iban vestidas de forma muy conservadora. No salían de casa sin el chador. Pero las cosas cambiaron después de que se inaugurase allí una universidad. Fueron unas cuantas jóvenes de Teherán a estudiar allí y, bajo su influencia, las mujeres del pueblo empezaron a transformarse. Lo primero fue su aspecto –comenzaron a salir sólo con pañuelo y [abrigo largo], como hacen las mujeres de las grandes ciudades– y empezaron a ser más conscientes de sus derechos.

Están produciéndose cambios culturales. En la generación de más edad, había una enorme diferencia entre la gente que creció en las grandes ciudades y los que vivían en pueblos. Pero en la actual, esas diferencias han disminuido. Internet ha desempeñado un papel importante porque ahora hasta los campesinos utilizan la Red.

Creo que un día habrá democracia en Irán, una democracia creada por el pueblo iraní y que le pertenezca a él. [Pero] debemos ser realistas. También he visto algunas jugadas políticas fuera del país por parte de gente que quiso explotar la crisis en el interior en su propio beneficio. Me presionaron para que me involucrara, pero la política no me interesa. Si hay algo que pueda hacer, será sólo a través de mi labor artística. A los políticos les atrae demasiado el poder, y aquellos apegados a él son precisamente los que nunca deberían ejercerlo.

Persépolis lo escribí no como acto político, sino porque estaba harta de las tonterías que estaban diciéndose sobre mi país y quería contar mi historia como parte de la verdad".
Marjane Satrapi, entrevistada por Golnaz Esfandiari para la revista Foreign Policy (edición española, junio-julio 2010). Vista en La Cárcel de papel

1 comentario:

absence dijo...

Me hace gracia la respuesta seria de Satrapi hablando de homenajes al cine en la nueva adaptación. Cuando enrevisté a Vincent Paronaud, aka Winshlus, su respuesta fue: "sólo la idea de embarcarse en otra película de animación nos agota. Así que adaptaremos Pollo con ciruelas, pero con actores reales." Tampoco es que una cosa contradiga la otra, pero me resulta gracioso el contraste.